El entrenamiento de tipo HIIT es la opción preferida a la hora de quemar grasa y mantener músculo.
El entrenamiento HIIT ( high intensity interval training) o entrenamiento de alta intensidad por intervalos, es indicado para aquellos runners que desean preservar la masa muscular.
Hay diversas maneras de practicarlo para realizar un entrenamiento HIIT de carrera.
- Entrenamiento HIIT de running en llano con sprints cortos
La magia de los sprints es que tienes que correr a la máxima velocidad posible, en períodos cortos de tiempo. En este caso, alternamos series muy cortas de alrededor de 15 a 30 segundos con descansos más largos durante los cuales el organismo se recupera. Así, realizamos un trabajo de alta intensidad, seguido de unos segundos de descanso, que podemos hacerlo con un trote suave o caminando.
- Entrenamiento HIIT de running con sprints cortos en cuesta
Los sprints en cuesta son otra de las maneras que tenemos de subir pulsaciones, de forma sencilla. Al combinar la carrera de alta velocidad con la carrera en pendiente, siendo uno de los entrenamientos más temidos por los corredores, pero que ayuda a mejorar nuestra potencia de carrera, fortaleciendo la musculatura en la zona de los glúteos. Los periodos de trabajo de alta intensidad deberán ser muy cortos (10 o 15 segundos), si lo que pretendemos es hacer varios sprints manteniendo una velocidad alta.
- Entrenamiento HIIT en cinta de correr
La mayoría de los runners recurre a la cinta en caso de condiciones climáticas, no a todos les agrada. Practicar el entrenamiento HIIT en la cinta puede ser muy beneficioso, ya que nos permite controlar, tanto el ritmo de carrera en los sprints, como la inclinación del terreno. Al realizar los intervalos de sprints sobre la cinta nos aseguramos que vamos a llevar la misma velocidad durante todo el tiempo que dure ese sprint. Tiene la ventaja que durante los descansos nos aseguramos no parar de golpe.
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