Es la tradición de los argentinos comer un asado cualquiera sea el motivo que lo amerita. Es la excusa perfecta para encontrarse con la familia o amigos así disfrutar y saborear esta sana costumbre argentina.
El tradicional asado argentino tan requerido y por el que los turistas reclaman a su llegada. Ya es un símbolo que nos caracteriza por ser un plato realmente delicioso. La carne argentina es de excelencia y cocinarla en una parrilla por encima de las brasas toma un sabor de tal magnitud que nadie se le puede resistir.
Son a los gauchos a quienes se le atribuye su origen en las pampas argentinas de América Latina. El asado tipificado como tal apareció como platillo de cabecera en el recetario de cocina popular Argentina que elaboró la salteña Juana Manuela Gorriti en 1890, en su libro llamado “Cocina Ecléctica”. Asado deriva de la palabra “asar” en español significa poner en la parrilla.
Nuestro asado se destaca porque su carne, ya sea costillas, vacío u otro corte va acompañado de achuras y donde se presta a degustar un buen vino tinto.
El ritual del asado argentino consiste en la preparación del fuego y mientras las brasas arden, se coloca la parrilla en la cual irán los cortes de carne vacuna, puede ir acompañada de otras carnes, también. Se debe estar atento para proporcionar una perfecta cocción, son las funciones de un buen asador. Acompañarlo con ensaladas o algunas salsas está en la decisión de cada uno, aunque sin estos complementos, saborear un pedazo de carne sola al fuego es de un gran placer.
Un dato para destacar es cuando Argentina entró en el libro de los records en 2011, con el mayor asado cocinado en la historia: 13 toneladas de carne vacuna para 30.000 personas. Esto fue el detonante para que todo el que pise suelo argentino siente la curiosidad de conocer el sabor típico de un buen asado y para beber un vaso de vino… si es de Mendoza mejor… ¡¡¡qué más se puede pedir!!!
Producción periodística: Patricia F.F.
Gentileza: Areco Tradición / Wikipedia
Fotos: Pinterest