Otros de los atractivos que ofrece la provincia de Mendoza en Argentina, es visitar la reserva natural Villavicencio.
Me atrajo la idea de compartir todo un día entre la flora y fauna de nuestra precordillera a bordo del <Truck>, transitando parajes increíbles, además de visitar la mina abandonada, ubicada en Los Hornillos.
Previo a esto, con algunas paradas para apreciar el impactante paisaje cordillerano. Entre ellos, ver volar cóndores en busca de su alimento, o como la tropilla de guanacos desparramados en las laderas de las montañas. Todo un escenario digno de admirar. Un deleite durante todo un día.
A 47 kilómetros de la ciudad de Mendoza y a 1748 msnm (metros sobre el nivel del mar) se encuentra el <Hotel Termas de Villavicencio>. Su última temporada fue en el año 1978, que albergó a la prensa para los encuentros del Mundial de Fútbol. Actualmente permanece cerrado. Allí se encuentra la reserva natural. A partir de ahí, nos dirigimos a un camino de cornisa.
Los caracoles de Villavicencio tienen 17 km de extensión, con gran cantidad de curvas, 365, por algo la llaman la “ruta del año”, nos va elevando hasta llegar al hogar del cóndor. Con algunas paradas previas, como jugar al eco en el <Balcón de la Quebrada del Toro>.
El silencio de la montaña, tan cercanas al cielo azul, que caracteriza a la provincia, es tan imponente su belleza, que se detiene en las quebradas, donde su fauna se desliza sin preocupación alguna.
Vemos tropillas de guanacos, choiques o ñandúes cordilleranos, cóndores, hasta un búho “tucucuré” dentro de la mina.
En cuanto a su flora, predomina la Jarilla con flores, entre otras especies.
En este trayecto, a 25 km de Uspallata, se encuentran las antiguas construcciones mineras, las< minas de Paramillos>. Fueron descubiertas en el año 1638, siendo explotadas primero por los Huarpes y luego, los Incas, muy avezados mineros, quienes habrían realizado trabajos en la zona para extraer plata. Estas fueron explotadas por los Jesuitas entre los siglos XVII y XVIII con 4500 aborígenes que trabajaban en las galerías subterráneas.
Mica Cuarzo
Algunas de ellas, hoy son parte de dos circuitos de turismo aventura. Nuestro tour nos permitió entrar en la mina de Los Hornillos, donde se pueden observar las vetas de diversos minerales y elementos utilizados en los trabajos de explotación.
Cascos para entrar a la mina Dentro de la mina vimos galena con plata
Toda una travesía que nos deja apreciar las bondades de nuestra naturaleza. Con tantos antecedentes históricos tan significativos para la historia de una provincia rica, cercana al cordón cordillerano de Los Andes, nuestra Mendoza.
En fila para ver el coloso de América A los lejos el “Aconcagua “
Al regreso, después de un deseado almuerzo, realizamos una visita autoguiada por el predio completo del <Hotel Villavicencio>.
Jardines que rodean el hotel Impactante Reserva Natural
Siguiendo las estaciones, doce en total, se observa una increíble forestación, frondosa, diversidad de tipos de árboles, flores. Un verdadero bosque verde colmado de frescura acompañado del perfume que desprenden sus plantas.
Un “Safari andino”, un día de disfrute, un día de conocer un poco más de nuestros antepasados y de nutrirnos de beldades naturales.
¡¡¡ Imperdible !!!
Esta ruta está llena de historia, cada sitio tiene un significado, lo cual sería muy extenso escribirlo en una nota. Hay mucha documentación histórica y relatos de viajeros, que ofrecen testimonio de paisajes, usos y costumbres , infraestructura y actividades de lo que se vivió en estas minas del <Paramillo de Uspallata>, más precisamente, en la provincia de Mendoza.
Producción General: Patricia Fragapane Federiconi
Fotos: MEV
Info: In Mendoza
Gentileza: Marcelo de Los Andes Trucks