Altea poseedora de un ambiente típico del lugar. Con sus fachadas de color blanco y aceras hechas de piedras que brillan al pasar.
Altea es uno de los pueblos más encantadores de la Costa Blanca. Una localidad de tradición pesquera con mucha historia por detrás. Este municipio español se encuentra en la provincia de Alicante, situado en la Marina Baja en la costa mediterránea. Muy cerca de Calpe y Benidorm.
El nombre Altea proviene del griego Althaia, que significa “yo curo”. Durante la última fase del dominio musulmán Altea perteneció a la taifa de Denia. Fue conquistada en 1244 por Jaime de Aragón hasta la toma posterior por los austracistas de Denia y Valencia.
Altea es recorrerla una y mil veces. Su magia, rodeada del azul mediterráneo hace de este lugar, un ambiente sedoso y deslumbrante a la vez. Es tan mística, que sólo se la puede vivir y palpar transitando sus típicas y empedradas aceras, con sus enredaderas de flores fucsias, violetas y corales.
Estilo colonial 
Camino al casco antiguo
Desde el paseo marítimo que empieza en el puerto, se aprecia el “casco antiguo”, el cual despierta ansiedad por llegar y saber de su historia. Al subir por sus calles de piedras, se observan las tiendas de artesanías y la arquitectura de las casas con sus tejas azules. Son muchas callecitas, algunas de ellas levan algunas plazas como la Plaza de la Cruz.
Tiendas de moda, joyas y souvenirs 
Fachada en blanco y azul
Estas aceras se dirigen a la zona más alta donde encontramos la iglesia de la “Señora del Consuelo”, una de las edificaciones características de Altea, conocida como la cúpula del Mediterráneo. Al andar unos metros más, está el mirador para ver Altea desde las alturas.
Iglesia Señora del Consuelo 
Mirador Altea
Al bajar a la costa, es un placer poder bañarse en la playa de la Roda, que la diferencia de otras playas por sus piedras. Al ser tan poco concurridas son más solitarias y relajadas, donde el descanso es un verdadero placer.
Hay mucho más para recorrer en Altea, como tomar un café en la plaza del ayuntamiento que conecta el paseo marítimo con el casco antiguo.
Altea, un lugar, un mundo distinto, un bálsamo de plenitud.
Producción periodística: Patricia F. F.
Fotos: Más Estar Vital (MEV)